La humanidad está en continuo progreso, pero no siempre ha sido así.
La riqueza generada en tan solo 150 años ha sacado de la pobreza extrema a gran parte de la humanidad. Antes de 1820 todas las personas eran pobres. Solo una pequeña minoría era rica: los monarcas, nobles, aristócratas y autoridades religiosas. La desigualdad económica en las sociedades pre modernas era extremadamente alta y la persona promedio vivía en condiciones que hoy llamaríamos pobreza extrema. El siguiente gráfico muestra que durante el milenio anterior (del año 1,000 al 2,000, la riqueza creada se mantuvo casi estática durante 800 años. Es después del año 1800 que el crecimiento económico empieza a acelerarse. Pero es a partir de 1900 que crece más rápidamente.
Hoy, con la ingente cantidad de datos que miden los indicadores económicos de los países, se conoce más precisamente la evolución de la economía en el mundo. Desde 1870, ciento cincuenta años después, la creación de riqueza se ha multiplicado doce veces, como promedio mundial
Durante milenios, desde la época romana hasta la Edad Media y el Renacimiento, los humanos lucharon por sobrevivir con el sudor de su frente, a menudo sólo sobrellevando una rudimentaria existencia. Estaban constantemente protegiéndose contra la muerte prematura, las enfermedades, el hambre, la guerra y los salarios de subsistencia. Sólo unos pocos afortunados —principalmente gobernantes y aristócratas— vivían vidas tranquilas, e incluso esos estaban crudos según las normas modernas. Para el hombre común, poco cambió a lo largo de los siglos. Los salarios reales per cápita eran prácticamente los mismos, año tras año, década tras década. Durante esta época, cuando la vida promedio era de apenas cuarenta años, el escritor inglés Thomas Hobbes calificó con razón la vida del hombre como “solitaria, pobre, desagradable, brutal y corta”. Mark Skousen. “The big three in economics: Adam Smith, Karl Marx, and John Maynard Keynes” (2007)
“En los dos siglos transcurridos desde 1820 hasta ahora, la disponibilidad de bienes y servicios sencillamente explotó. No se trató de cambios menores: hubo enormes cantidades de cambios, porantes de 1820, las personas nacían y morían prácticamente en el mismo mundo. Desde que nacían hasta que morían, el mundo no cambiaba mucho. Pero a partir de 1820, comenzó a transformarse vertiginosamente.” Jim Yong Kim, Presidente del Grupo Banco Mundial. Discurso en American University. Washington, 10 de abril de 2018.
“Durante el siglo XIX, el llamado “capitalismo” aumentó el salario real del trabajador británico en un 400 por ciento; El salario real promedio del trabajador estadounidense aumentó, entre 1840 y 1951, de dieciocho a ochenta y seis centavos por hora. Un buen hada difícilmente podría haber trabajado más rápido.” Max Eastman. Reflections on the Failure of Socialism. 1940.
Para tomar un período más reciente, el PIB per cápita ha pasado de $5,494 en 1990 a $17,913 en 2018, es decir se ha multiplicado 3.3 veces en tan solo 28 años. Sin embargo, el crecimiento no ha sido igual en los países y regiones. Aun así, todos han crecido. Europa Occidental creció 16 veces, Estados Unidos y América Latina 14 veces.
En sólo los últimos 20 años, el crecimiento económico ha sido fenomenal, al mismo tiempo que se redujeron las diferencias en la distribución de riqueza entre países.
“La riqueza mundial creció aproximadamente un 66 % entre 1995 y 2014 (de USD 690 billones a USD 1140 billones en dólares estadounidenses constantes de 2014 a precios de mercado). La proporción de la riqueza mundial de los países de ingresos medianos está creciendo: pasó del 19 % al 28 % entre 1995 y 2014, mientras que la proporción de la riqueza mundial de los países de ingreso alto de la OCDE disminuyó del 75 % al 65 %.
De acuerdo con las últimas estimaciones, el 10 % de la población mundial vivía con menos de USD 1,90 al día en 2015, en comparación con el 11 % en 2013. Esta proporción es inferior al valor de casi 36 % registrado en 1990. En la actualidad, casi 1100 millones de personas menos viven en la pobreza, en comparación con 1990. En 2015 había 736 millones de personas que vivían con menos de USD 1,90 al día, cifra inferior a los 1850 millones de 1990.” Banco Mundial. Pobreza: panorama general (2019)
“Nunca, en toda la historia de la humanidad, el planeta Tierra había tenido una tasa de pobreza extrema tan baja como la que tenemos en el 2015. La tasa de pobreza extrema mundial se ha dividido por 5 desde 1970 y se ha dividido por 2 desde 1990. Es decir, los objetivos del milenio que pedían que la pobreza se dividiera por dos entre 1990 y 2015 se consiguieron. El éxito fue tan rotundo que a septiembre de 2015, las Naciones Unidas propusieron un nuevo objetivo para la humanidad: erradicar la pobreza extrema en 2030.” Xavier Sala i Martin. Economía en Colores (2015)
Otra comparación interesante muestra que en los primeros 1800 años de la era cristiana, el ingreso per cápita prácticamente no creció. El crecimiento se ha producido en los últimos 200 años y su tasa de crecimiento se ha ido acelerando, como muestra el siguiente gráfico.
Como consecuencia, el tiempo necesario para que se dupliquen los ingresos se ha venido reduciendo, pasando de 107 años de 1800 a 1900, a 23.5 años en los años transcurridos desde 2000 hasta 2014. De continuar la tendencia, para 2030 el ingreso per-cápita se estaría duplicando cada 14 años, o menos.
¿Qué es lo que ha causado el progreso? Lo podemos atribuir a la innovación tecnológica. Como veremos, han sido las sucesivas innovaciones tecnológicas introducidas las que han multiplicado la cantidad y diversidad de bienes y servicios, llenando cada vez más necesidades para cada vez más personas en el mundo.
El despegue de las innovaciones tecnológicas empieza con la abolición del régimen feudal y su sustitución por el capitalismo. Como lo dijo Marx en 1948, “La burguesía, durante su gobierno de escasos cien años, ha creado fuerzas productivas más masivas y colosales que todas las generaciones anteriores juntas“. Esas fuerzas productivas fueron creadas por la introducción de nuevas tecnologías.
Las sucesivas oleadas de cambios tecnológicos desde los inicios de la primera revolución industrial se han originado en países capitalistas, es decir, en economías donde empresas privadas compiten en el mercado para vender sus productos a los consumidores. Las empresas privadas y los empresarios han sido los motores fundamentales para que las innovaciones tecnológicas se hagan realidad.
Sin embargo, para muchas personas, el progreso no se ve. Y puede que tengan razón si viven en países donde la economía ha retrocedido y la pobreza ha aumentado. Pero ese no es el caso de gran parte del mundo. También, solo podemos ver el progreso desde nuestra propia perspectiva limitada al tiempo que hemos vivido y comparar la situación presente con la memoria de nuestro pasado. Otro aspecto que incide en desconocer el progreso es que muchas de las cosas o servicios que hoy tenemos o usamos ya las percibimos como dadas pues siempre hemos disfrutado de ellas, cuando la verdad es que hace 50, 100 o más años no existían. Agreguemos a esto la influencia de los medios de comunicación que solamente publican los aspectos negativos, los sucesos de nota roja que acaparan la atención de la audiencia: guerras, crímenes, desastres, accidentes, contaminación, desempleo, inflación, desigualdad, etc., con lo cual el mundo nos parece cada vez peor que antes.
A esto se refiere Steven Pinker en su conferencia en TED Talk “El mundo, ¿está mejorando o empeorando? Una mirada a los números”:
Siempre pueden engañarse y ver un deterioro si comparan los titulares sangrientos del presente con las imágenes color de rosa del pasado. ¿Cómo se ve la trayectoria del mundo si medimos el bienestar a lo largo del tiempo usando un criterio constante?
Durante el año pasado (2017) hubo 12 guerras en curso, 60 autocracias, un 10 % de la población mundial viviendo en extrema pobreza y más de 10 000 armas nucleares. Pero hace 30 años había 23 guerras, 85 autocracias, un 37 % de la población mundial viviendo en extrema pobreza y más de 60 000 armas nucleares. …
Angus Deaton nos ofrece una visión de las diferencias de crecimiento económico en los países.
Desde el término de la segunda Guerra Mundial, que dejó a gran parte de Europa en desorden económico y social, los países más ricos del mundo han crecido rápidamente, primero reparando el daño y después avanzando hacia nuevos niveles de prosperidad. También han tendido a converger en
su crecimiento, y las diferencias entre sí actualmente son pequeñas en comparación con las diferencias entre ellos y el resto del mundo.
Naturalmente, cuando incluimos a los países pobres la variedad de ingresos promedio es mucho más grande… . cuando analizamos a todos los países
transversalmente, la dispersión de ingresos promedio —la desigualdad de ingreso país por país a nivel internacional— no disminuye a través del tiempo.
Las tasas de crecimiento en los países pobres no han sido más bajas que las de los países ricos, y en ocasiones han sido más altas, pero mientras algunos países han crecido rápidamente y están en el camino para alcanzar a los ricos, otros se han retrasado más y más. La diversidad de la experiencia de crecimiento ha sido mucho mayor en los países más pobres. Algunos países han sido capaces de aprovechar las oportunidades para cerrar la brecha con respecto a los países ricos. Un grupo de países asiáticos —China, Hong Kong, Malasia, Singapur, Corea del Sur, Taiwán y Tailandia—, así como un país africano, Botswana, crecieron a más de 4% al año de 1960 a 2010 —un incremento de más de siete veces el ingreso promedio durante cinco décadas—. Al mismo tiempo, la República de África Central, la República Democrática del Congo (RDC), Guinea, Haití, Madagascar, Nicaragua y Níger en realidad eran más pobres en 2010 que hace medio siglo, y hay otros países que casi seguramente son parte de este grupo, pero para los cuales los datos no existen. (Probablemente Afganistán, Djibuti, Liberia, Sierra Leona y Somalia son candidatos para integrar este grupo, así como varios de los países que en 1960 eran parte de lo que entonces se llamaba el Bloque del Este.)
Dos de las naciones de más rápido crecimiento son China y Singapur, pero la primera tiene una población que es más de 300 veces la de la segunda. La India, el otro gigante, no se expandió tan pronto ni tan rápidamente como China, pero ha crecido a una tasa mayor que el doble del promedio mundial desde 1990. Aunque China y la India sólo son dos países, su rápido crecimiento a fines del siglo significó que alrededor del 40% de la población mundial vivía en países que estaban desarrollándose muy velozmente. En contraste, en el extremo “malo” de la distribución del crecimiento, los países que han estado retrocediendo son pequeños en muchos casos (aunque hay excepciones, como la RDC, que es grande y es un fracaso espectacular).
Al analizar las tasas de crecimiento —no en términos de cuántos países han tenido crecimiento elevado, sino en términos de cuántas personas han experimentado el crecimiento elevado—, el crecimiento global asume una apariencia más color de rosa. El país promedio creció 1.5% al año durante el medio siglo posterior a 1960, pero la persona promedio vivió en un país que crecía 3% al año. China y la India, donde vive mucha gente, han crecido mucho más velozmente que el país típico. Angus Deaton. El Gran Escape. 2015.
Un factor fundamental para el progreso económico mundial ha sido lo que se conoce como globalización. ¿Qué es la globalización?
Cuando dentro de unos años los historiadores miren hacia atrás y se pregunten cuál fue el producto más emblemático del año 2000, seguro que llegarán a la conclusión de que fue el teléfono móvil. Millones de personas del mundo entero han pasado a depender de un aparato que hace poco ni tan siquiera existía. El teléfono móvil simboliza aquello que muchos denominan la globalización. Representa unas nuevas tecnologías que incluyen el ordenador, la red de Internet y la ingeniería genética. El teléfono móvil representa la comunicación constante, prácticamente instantánea y muy barata entre cualquier punto del planeta y permite saber lo que sucede en cualquier parte del globo de manera casi inmediata. El teléfono móvil representa la producción transnacional: la empresa que los produce puede tener capital finlandés, utilizar tecnología norteamericana, producir cada una de las partes que constituyen el aparato en una docena de ciudades donde se contratan a trabajadores que hablan una docena de idiomas distintos, montar los aparatos en Helsinki y vender el producto final por todos los países del mundo. La mundialización de los procesos productivos conlleva que el planeta entero se esté convirtiendo en un único mercado global donde los capitales, las tecnologías, la información, los trabajadores y los productos saltan de un país a otro aparentemente sin posibilidad de ser detenidos.
Y todo esto es lo que representa la globalización, que podría definirse como la situación en que existe el libre movimiento internacional de cinco factores: el capital, el trabajo, las tecnologías, el comercio y la información.
… Si la globalización es la situación en la que ni las distancias físicas ni las fronteras impiden el movimiento de mercancías, capitales, personas, capital e información, ¡el mundo actual no es, ni de lejos, un mundo totalmente globalizado! Lo que sí es cierto es que estamos viviendo un proceso que nos lleva hacia una mayor globalización. Xavier Sala i Martin. Economía liberal para no economistas y no liberales (2001)
La globalización económica se refiere a la creciente interconexión de los mercados en diferentes países. Este proceso se refleja en el crecimiento del comercio internacional y la inversión extranjera y, especialmente, en el aumento de los flujos financieros internacionales.
La característica común en todos estos procesos es la enorme movilidad internacional del capital. La mayor movilidad internacional del capital afecta tanto a la producción como a las finanzas. … La inversión extranjera incluye los gastos en el extranjero en activos productivos, independientemente de su nacionalidad, …
En contraste, la globalización de las finanzas implica préstamos bancarios internacionales e inversiones de cartera, que son compras por extranjeros de acciones, bonos y cuentas bancarias. En resumen, la globalización de las finanzas se refiere exclusivamente a los flujos monetarios, mientras que la globalización de la producción implica tanto la inversión extranjera directa como el comercio internacional.
Otro aspecto de la globalización es la vigorosa entrada en el sistema capitalista mundial de una serie de grandes países y regiones que anteriormente habían sido sospechosas o hostiles a este sistema económico. La República Popular China sigue siendo un país comunista en el que su esfera política está totalmente dominada por el Partido Comunista Chino. Pero su economía sólo puede caracterizarse como capitalista, ya que las empresas privadas están en auge, los especuladores inmobiliarios y los desarrolladores controlan el mercado de la propiedad en las principales ciudades, y las corporaciones transnacionales de los Estados Unidos, Japón y Europa han acudido a China. Los países de Europa del Este y Rusia, el antiguo bloque soviético, que rápidamente pasó de socialista a capitalista después de 1989, han implementado planes integrales para privatizar lo que era propiedad estatal. Muchos de estos países son ahora miembros de la Unión Europea y de la Organización Mundial del Comercio. En los últimos 10 años, la India ha abierto sus fronteras al comercio exterior y a la inversión en un grado que no se ha visto desde que se independizó en 1947. La entrada de estos países en la economía mundial ha significado nuevos mercados para los productores de todo el mundo y nuevas fuentes de competencia por bienes y servicios de bajos salarios. El efecto general de la entrada de estos países en el sistema capitalista mundial es la adición de 1.600 millones de trabajadores a la fuerza laboral global, lo que el economista Richard Freeman ha llamado “la gran duplicación“. Robert L. Heilbroner and William Milberg. The making of economic society 13th ed. 2012
Veamos ahora las diferentes facetas en que se manifiesta el progreso de la humanidad.
Pasemos a los datos, comenzando por el más valioso de todos: la vida. Durante casi toda la historia humana, la esperanza de vida al nacer eran 30 años. Hoy en día, mundialmente, es de más de 70 años, y en el mundo desarrollado es de más de 80 años. Hace 250 años, en los países más ricos del mundo, un tercio de los niños no vivían para ver su quinto cumpleaños, antes de que el riesgo descendiera 100 veces. Hoy en día, menos de un 6 % de los niños corren esa misma suerte en los países más pobres del mundo. La hambruna es uno de los cuatro jinetes del Apocalipsis. Puede llevar la devastación a cualquier parte del mundo. Hoy, la hambruna ha sido desterrada a las regiones más remotas y devastadas por la guerra. Hace 200 años, un 90 % de la población mundial subsistía en extrema pobreza. Hoy en día, menos del 10 % de la gente lo hace. En casi toda la historia humana, los estados poderosos y los imperios estuvieron casi siempre en guerra entre sí, y la paz fue simplemente un interludio entre las guerras. Hoy en día, nunca están en guerra entre sí. La última gran guerra de poder enfrentó a EE.UU. contra China hace 65 años. Más recientemente, guerras de toda clase han disminuido y son menos mortales. La tasa anual de guerras disminuyó de un 22 por cada 100 000 al año, al principio de la década del 50, a 1,2 por cada 100 000, hoy en día. La democracia ha sufrido, sin duda, retrocesos en Venezuela, Rusia, Turquía y está amenazada por el aumento del populismo autoritario en el este de Europa y en EE.UU. Sin embargo, el mundo nunca ha sido más democrático que en la década pasada, con dos tercios de la población mundial viviendo en democracias. Las tasas de homicidio caen siempre que la anarquía y el código de venganza son reemplazados por el estado de derecho. Ocurrió cuando la Europa feudal fue puesta bajo el control de reinos centralizados, por lo que, hoy en día, un europeo tiene una posibilidad de ser asesinado de 1 en 35 comparado con sus ancestros medievales. Ocurrió nuevamente en la Nueva Inglaterra colonial, en el Salvaje Oeste de EE.UU., cuando los sheriffs se mudaron a la ciudad y en México. Steven Pinker. El mundo, ¿está mejorando o empeorando? Una mirada a los números.
Uno de los indicadores del progreso por el que se interesa más la gente es la reducción de la pobreza. Angus Deaton, en su obra “El Gran Escape” se refiere al asunto diciendo: “el rápido crecimiento de los ingresos promedio, especialmente en China y la India, y particularmente después de 1975, hizo mucho para reducir la pobreza extrema en el mundo. En China más que en cualquier otra parte, pero también en la India, el escape de cientos de millones de una pobreza tradicional y largamente establecida califica como el Escape más Grande de todos.“
La tabla siguiente muestra que la pobreza extrema en el mundo se ha reducido del 90% hace dos siglos a poco menos del 10%.
Siguiendo con el análisis de Steven Pinker sobre el progreso mundial, nos dice:
Verdaderamente, nos volvimos más seguros en todos los modos posibles. Durante el último siglo, alcanzamos un 96 % menos de probabilidad de morir en un accidente de auto, un 88 % menos de posibilidad de ser abatidos en la acera, un 99 % menos posibilidad de morir en un accidente de avión, un 95 % menos de posibilidad de morir en el trabajo, un 89 % menos de posibilidad de morir por un desastre natural, como una sequía, inundación, incendio forestal, tormenta, volcán, deslizamiento de tierra, terremoto o meteorito, presumiblemente no porque Dios esté menos enojado con nosotros sino por las mejoras en la resistencia de nuestra infraestructura. ¿Y qué sobre el desastre natural supremo el proyectil lanzado por el mismo Zeus? Sí, tenemos un 97 % menos de posibilidad de que nos mate un rayo.
Antes de siglo XVII, solo un 15 % de los europeos sabían leer o escribir. Europa y EE.UU. alcanzaron la alfabetización universal a mediados del siglo XX, y el resto del mundo la está alcanzando. Hoy en día, más del 90 % de la población mundial de menos de 25 años sabe leer y escribir. En el siglo XIX, los occidentales trabajaban más de 60 horas por semana. Hoy en día, trabajan menos de 40 horas. Gracias al suministro universal de agua corriente y electricidad en el mundo desarrollado y la adopción general de lavarropas, aspiradoras, refrigeradores, lavavajillas, hornos y microondas, la cantidad de tiempo que pasamos en tareas domésticas se redujo de 60 horas por semana a menos de 15 horas por semana.
Todos estos avances en salud, riqueza, seguridad, conocimiento y ocio, ¿nos hacen más felices? La respuesta es sí. En un 86 % de los países del mundo, la felicidad ha aumentado en las décadas recientes.
Bien, espero haberlos convencido de que el progreso no es cuestión de fe u optimismo, sino una realidad de la historia humana, de hecho, la realidad más grande en la historia humana. ¿Y cómo han cubierto los medios esta realidad? Una tabulación de palabras sobre emociones positivas y negativas en las noticias mostró que durante las décadas en las que la humanidad se volvió más sana, más rica, más sabia, más segura y más feliz, “The New York Times” se volvió cada vez más malhumorado y las transmisiones de TV también se fueron volviendo más sombrías. Las noticias son sobre cosas que ocurren, no cosas que no pasan. Nunca ven un periodista que diga: “Estoy transmitiendo en vivo desde un país que estuvo en paz durante 40 años”, o una ciudad que no ha sido atacada por los terroristas. Además, las cosas malas suelen ocurrir rápidamente, pero las cosas buenas no se construyen en un día. Los periódicos podrían destacar: “137 000 personas escaparon ayer de la extrema pobreza”, cada día durante los últimos 25 años. Eso es 1,250 millones de personas que dejaron atrás la pobreza, pero nunca leen sobre eso. Además, las noticias capitalizan nuestro interés mórbido en lo que puede ir mal, capturado en la política de programación … el mundo está por terminarse ya desde hace mucho tiempo. Steven Pinker. El mundo, ¿está mejorando o empeorando? Una mirada a los números.
Para ilustrar el crecimiento y desarrollo económico mundial en las últimas décadas usaremos los principales indicadores globales del Banco Mundial.
Primero veremos cómo ha sido la evolución de la población total en el mundo, ya que algunos análisis son más pertinentes cuando se refieren a las personas. La población mundial ha aumentado desde 3,032 millones de personas en 1960 a 7,594 mil millones en 2018, se ha multiplicado por 2.5 veces. En el siguiente gráfico interactivo puede ver el dato para cada año colocándose sobre la línea.
La mayoría de la población vive en Asia Oriental, como puede verse en el siguiente gráfico:
La esperanza de vida al nacer pasó de 53 años en 1960 a 72 años en 2017 en el mismo período.
Uno de los indicadores que componen el Índice de Desarrollo Humano (IDH) que elabora Naciones Unidas es la esperanza de vida al nacer, que nos indica el efecto de las mejoras en la salud y que nos permite vivir más tiempo. El aumento en la esperanza de vida se ha distribuido más uniformemente en el mundo que los ingresos. Es lo que muestran los resultados de un análisis de este indicador en una publicación:
“Utilizando datos demográficos accesibles para todos, Sam Peltzman hizo el ejercicio de medir la desigualdad en la esperanza de vida en un artículo de 2009 en el Journal of Economic Perspectives . Se calculó el coeficiente de Gini para ese indicador desde finales del siglo 19 para muchos países y ya en 1750 para algunos países como Suecia y Alemania. El coeficiente de Gini toma un valor de cero si hay igualdad perfecta y un valor de uno si hay desigualdad perfecta.
“¿Qué resulta de su ejercicio? El coeficiente de Gini para Suecia, Inglaterra, Francia, Alemania y los Estados Unidos se situó entre 0,4 y 0,5 para la mayor parte del siglo 19. Sin embargo, hubo una clara tendencia a la baja en la desigualdad de la mortalidad, por lo que para 1900, el nivel había caído a un rango entre 0.3 y 0.4. Para 1950, la caída había continuado y se situó entre 0.1 y 0.2. Hoy está más cerca de 0.1. Disminuciones similares se observan en países como India, Brasil y Japón en el transcurso del siglo. 20.
“De hecho, Peltzman señala que en algunos países como India y Brasil, “la mortalidad se distribuye más que el ingreso”. Este es un colapso trascendental en la desigualdad en la esperanza de vida. The Underappreciated Trend in Mortality and Inequality
Asociada con la esperanza de vida al nacer está la mortalidad infantil, que mide la intensidad de la mortalidad durante el primer año de vida. El siguiente gráfico dinámico muestra la fuerte reducción que ha tenido por regiones en el mundo desde 1950 a 2015.
El Producto Interno Bruto (PIB) (a precios actuales) pasó de 1,371 a 85,804 billones de US$ en el mismo período, aumentando 62.6 veces.
Pero el PIB per capita, como indicador de la producción promedio por persona, no necesariamente refleja cómo se distribuye el ingreso. El PIB per capita puede crecer, pero no nos dice nada sobre cómo crecen los ingresos en los diferentes grupos poblacionales. El grado de equidad en la distribución del ingreso se mide por el Coeficiente de Gini. El siguiente mapa de Wikipedia muestra este coeficiente por países.
Mientras mayor el índice, mayor la desigualdad existente en un país, mayores las disparidades de ingresos.
Sobre el tema de la desigualdad de ingresos y riqueza lea: Desigualdad y Desarrollo Económico: Por qué la desigualdad es necesaria para reducir la pobreza que trata el tema de cómo la desigualdad económica de origen legítimo contribuye a reducir la pobreza impulsando el progreso económico para todos y lo contrario sucede cuando la acumulación de riqueza tiene un origen ilegítimo.
Sin embargo, los ingresos explican solo una parte, aunque importante, del bienestar de las personas. Para medir otros elementos del bienestar humano y presentar una visión global de la calidad de vida de las personas, se desarrolló el Índice de Progreso Social (IPS), publicándose por primera vez en el año 2014.
El IPS “es un modelo integral de medición del desempeño social de un país, pues concibe que la calidad de vida de la persona esté compuesta por varios aspectos que se encuentran interrelacionados y que en conjunto impactan en su bienestar. Para el Índice, el progreso social es la capacidad de una sociedad para satisfacer las necesidades humanas fundamentales de sus ciudadanos, establecer los elementos básicos que permitan a individuos y comunidades mejorar y mantener su calidad de vida, y crear las condiciones para que todas las personas alcancen su pleno potencial.
Para capturar la calidad de vida, el Índice de Progreso Social agrupa indicadores sociales en tres dimensiones: 1) Necesidades Humanas Básicas 2) Fundamentos del Bienestar y 3) Oportunidades, los que a su vez se dividen en doce componentes. Esta estructura permite tener una visión a la vez global del desarrollo social y enfocada en temas relevantes para la vida de las personas.” Manuel Velazquez. El Origen del Índice de Progreso Social.
-
- El Índice de Progreso Social 2019, así como seis años de resultados, reflejan que el mundo, en general, está mejorando y muestra avances. Desde el inicio del SPI, en el año 2014, el mundo ha mejorado pasando de con una puntuación de 62.16 a 64.47. Por mucho, el mayor progreso se ha logrado con el Acceso a la Información y a las Comunicaciones (71.74), que mejoró con 11.49 puntos en los últimos seis años. El incremento en el acceso a internet y el aumento de suscripciones a teléfonos móviles, particularmente en el mundo en desarrollo, han jugado un papel importante.
- Sin embargo, el progreso es lento y desigual. El mundo está mostrando un rendimiento inferior comparado con lo que el promedio mundial del PIB per cápita sugiere que es posible. Esto indica que contamos con los recursos para ser mejores y que las cifras crecientes del PIB están ocultando los problemas reales que enfrentan las sociedades y que afecta a la gente común.
- Además, el Índice de Progreso Social se puede utilizar para medir el progreso frente a losObjetivos de Desarrollo Sostenible (SDGs, por sus siglas en inglés) de la ONU. De acuerdo con las proyecciones basadas en el Índice de Progreso Social 2019, con el ritmo actual, el mundo no alcanzará los SDGs sino hasta 2073. Deloitte. Índice de Progreso Social 2019,
Los principales hallazgos del IPS de 2020 son:
-
- El mundo obtiene las mejores puntuaciones en Nutrición y Atención Médica Básica (84,63), Vivienda (77,09), Agua y Saneamiento (74,72) y Acceso a los Conocimientos Básicos (75,18). El mundo obtiene las peores puntuaciones en Calidad ambiental (36,87) e Inclusión (39,25), las cuales están muy por detrás de todos los demás componentes del Índice.
- El mundo ha mejorado drásticamente en el acceso a la información y las comunicaciones (+21.61). Otras mejoras materiales incluyen: acceso a educación avanzada (+7.45), refugio (+6.10) y agua y saneamiento (+5.57).
- Noruega ocupa el primer lugar en el mundo en progreso social, con Sudán del Sur al final de la lista. El progreso más rápido durante la última década se da entre los países en desarrollo, incluidos Gambia, Sierra Leona, Túnez, Etiopía y Nepal.
- Estados Unidos es el único país del G7 que retrocede en el progreso social y uno de los tres únicos países que han disminuido durante la última década, junto con Brasil y Hungría.
- Los países en desarrollo se están poniendo al día. Desde 2011, la variación en las puntuaciones del índice ha caído un 12,3%. Las tasas de convergencia son más altas que las del PIB per cápita.
- El PIB no es un destino. Muchos países tienen un desempeño inferior al del progreso social en relación con su PIB, pero otros se desempeñan mucho mejor de lo que sus ingresos sugieren que es posible o probable. El mundo debe aprender de estos países para acelerar el progreso de manera más amplia. Deloitte. 2020 Social Progress Index results.
La publicación La economía mundial resumida en una gráfica dice que “La economía americana es tan grande que equivale a la suma de la de Japón, Alemania, Reino Unido, Francia, India, Italia, Brasil y Canadá (de la tercera a la décima economía del mundo). Si en vez de países, miramos continentes la cosa cambia y Asia lidera el ranking con un 33.84%, América un 27.95% y Europa un 21.37%. Las tres mayores economías de África (Sudáfrica, Egipto y Nigeria) no llegan al 1.5% (menos que España). Las suma de las 100 economías más pequeñas, que incluyen a países como Pakistan (182 millones de habitantes), Bangladesh (157 millones), Chile o la próspera Luxemburgo solo generan el 9.4% del PIB mundial. En una gráfica, el megapastel económico mundial quedaría así:
En este video se puede ver la evolución del PIB de las veinte principales economías del mundo desde 1960 con una proyección hasta el año 2030, visualizando cómo unas desplazan a otras en el transcurso del tiempo.
En este otro video, se puede ver esa evolución para los países Latinoamericanos
Las exportaciones de bienes y servicios (balanza de pagos, US$ a precios actuales) pasaron de US$ 1,375 billones en 1960 a US$ 25,102 millones en 2018, se ha multiplicado por poco más de 18 veces.
El Producto Interno Bruto (PIB) (a precios constantes de 2010), es decir, descontando la inflación, pasó de 11,394 a 82,635 billones de US$ en el mismo período, aumentando 7.25 veces
El Producto Interno Bruto per cápita, es decir promedio por persona, (US$ a precios constantes de 2010) pasó de 3,757.9 a 10,881.1 US$ en el mismo período, aumentando 2.9 veces
El Producto Interno Bruto per cápita de 2018, por países
La tasa de incidencia de la pobreza, sobre la base de $1,90 por día (2011 PPA)) pasó de 42.1% de la población en 1981 a 10% de la población en 2015, una reducción de 76%.
En 1990, más de un tercio de la población mundial vivía en situación de pobreza extrema, es decir con menos de USD 1,90 al día. En 2015, el último año en que se tienen datos sólidos, la pobreza extrema llegó al 10 %, el valor más bajo del que se tenga registro en la historia. En las últimas tres décadas, más de 1000 millones de personas salieron de la pobreza extrema, y esta se ha reducido a menos del 3 % en alrededor de la mitad de los países del mundo. Esto es uno de los grandes logros de nuestro tiempo, pero tenemos mucho más trabajo que hacer, ya que 736 millones de personas aún viven en la pobreza extrema, el ritmo de la reducción de la pobreza se está desacelerando, y será más difícil llegar a aquellos que viven en esa situación. La tasa de pobreza en zonas afectadas por fragilidad, conflictos y violencia subió del 34,4 % en 2011 al 36 % en 2015, y es probable que esa tasa aumente. Fuente: https://www.bancomundial.org/es/news/feature/2018/12/21/year-in-review-2018-in-14-charts
Este mapa interactivo muestra la incidencia de la desnutrición en el mundo. El último año con información es 2013 y se puede comparar con mediciones de años anteriores.
El Banco Mundial mide diferentes niveles de pobreza. La tasa de incidencia de la pobreza extrema se mide por el porcentaje de la población que vive con menos de 1.90 dólares al día; la pobreza grave, que se mide por menos de 3.20 dólares cada día y la pobreza más leve, que se mide bajo los 5,50 dólares. La tasa de incidencia de la pobreza, sobre la base de $3.20 por día (2011 PPP) pasó de 56.9% de la población en 1981 a 26.3% de la población en 2015, una reducción de 54%. Si se mide sobre la base de $1.90 por día, los que están en la pobreza extrema se han reducido de 42.1% a 10%, es decir, 4 veces.
En América Latina, la tasa de pobreza bajo la línea de $5.50 por día en 2017 se ilustra en el siguiente gráfico:
El siguiente gráfico muestra la incidencia de la pobreza en sus tres niveles de medición para los países de América Latina:
Un indicador relacionado con el nivel de ingresos en los países es el salario mínimo. El siguiente gráfico muestra los salarios mínimos por hora en el mundo en 2018
Este gráfico muestra los salarios mínimos mensuales en los países latinoamericanos:
La productividad del trabajo es otro indicador importante del progreso económico. El siguiente gráfico muestra los quince países con más alta productividad laboral en el mundo:
Este gráfico muestra la productividad laboral en los países del continente americano.
Los países con mayor inmigración y emigración se muestran en el siguiente gráfico. Los movimientos migratorios van generalmente desde los países pobres o con conflictos armados hacia los países desarrollados.
Este es un sitio interactivo de London School of Economics and Political Sciences que muestra los flujos económicos globales de inversión extranjera y sus impactos en las regiones del mundo.
Mapa mundi que muestra el tamaño de los países según la capitalización bursátil total de sus mercados. El tamaño de las bolsas de valores está relacionado al desarrollo económico de los países.
El acceso a la electricidad ha aumentado rápidamente desde 2010, (PDF, en inglés) y 40 países han logrado el acceso universal desde ese año. Sin embargo, alrededor de 1000 millones de personas, o el 13 % de la población mundial, aún vive sin electricidad. Las mayores brechas se registran en África al sur del Sahara, Asia central y Asia meridional. Casi el 87 % de la población que no tiene electricidad en el mundo vive en zonas rurales. Las diferencias son enormes, pero se han producido avances en numerosos frentes. Nuevos enfoques de gran escala que combinan electrificación con y sin conexión a la red han permitido lograr resultados asombrosos en el acceso a la energía en muchos países. En otros, las minirredes y los sistemas solares domésticos están demostrando ser prometedores para subsanar la brecha en materia de acceso. Los costos marcadamente más bajos de la energía limpia están contribuyendo a esta transición
Los científicos han estado utilizando imágenes satelitales de la Tierra por la noche, denominadas “luces nocturnas”, para estudiar la actividad humana y los eventos naturales durante casi 30 años.
Eche un vistazo a la península de Corea y observe la marcada diferencia entre el norte y el sur (ver Imagen abajo). Es un contraste de oscuridad y brillo, de aislamiento y conexión.
La revolución verde. El uso creciente de energías renovables se aceleró en los últimos años, en la medida en que los costos de producción disminuyen y las tecnologías avanzan. Algunas proyecciones indican que en dos décadas, la energía solar y eólica ocuparán casi la mitad de la capacidad eléctrica instalada en el mundo. Las innovadoras soluciones para generar más y mejores fuentes de energías renovables en el planeta. Otras señalan que para el año 2047 habrá unos 1.000 millones de autos eléctricos transitando por el mundo. Y la inversión en energías más limpias a nivel global podría llegar a los US$10,2 billones en el año 2040. BBC Mundo. 7 fuerzas que van a cambiar el futuro de la economía.
Muchos de los indicadores que se han mostrado son a nivel global. Pero, cuál fue el desempeño de los países capitalistas y de los países socialistas? Hay diferencias?
La mayor parte del crecimiento ha sido aportado por los países de economía de mercado, llamados capitalistas. Esto ha sido corroborado con datos. Por ejemplo, en un estudio realizado por Matei Dăian comparando el desempeño de los países de Europa Occidental con los de Europa Oriental y el Asia Central que estuvieron bajo el dominio comunista, llega a la siguiente conclusión:
«Existe una clara diferencia económica entre la Europa occidental más desarrollada económicamente y sus contrapartes más pobres en Europa del Este y Asia central. Pero, ¿qué causó esta divergencia económica? ¿Qué papel tan importante jugó el comunismo? Si el comunismo es responsable, ¿a través de qué mecanismos económicos logró obstaculizar el crecimiento? … Este documento encuentra no solo que el comunismo tuvo un enorme impacto negativo en el crecimiento, sino que a pesar de que el comunismo se había ido completamente de Europa en 1991; Todavía afecta el crecimiento de los antiguos países comunistas.» The Veil of Communism: An Analysis of Lifespan, GDP per Capita, Human Capital, and Agricultural Productivity in Eastern Europe .
Otra comparación es entre Estados Unidos y la URSS. Claramente se observa el menor desempeño de la economía soviética, medido por el crecimiento del Producto Interno Bruto.
El gráfico es de la investigación de Remco Kouwenhoven. A Comparison of Soviet and US Industrial Performance: 1928-90. Contiene gran cantidad de datos comparativos. Uno de ellos muestra que la productividad del trabajo en la industria soviética en 1986 era el 25% de la de los Estados Unidos.
Las economías socialistas no pudieron eliminar la pobreza. En la antigua URSS, «alrededor del 40% de toda la población en 1967 sería considerada pobre según los estándares soviéticos de 1974«, según un estudio mencionado en Nintil. En el resto de países socialistas de Europa Oriental, el nivel de pobreza era mayor, con la excepción de Alemania Oriental.
Tampoco se eliminó la desigualdad de ingresos, solo reduciéndola a un nivel similar al de algunos países nórdicos. Sin embargo, la desigualdad es encubierta por los privilegios no monetarios de que disfrutaba la nueva clase.
El Informe de Competitividad Global de 2019 es la última edición de la serie lanzada en 1979 que proporciona una evaluación anual de los impulsores de la productividad y el crecimiento económico a largo plazo. Con un puntaje de 84.8 (+1.3), Singapur es la economía más competitiva del mundo en 2019, superando a Estados Unidos, que cae al segundo lugar. Hong Kong SAR (3 °), Países Bajos (4 °) y Suiza (5 °) completan los cinco primeros.
Cada indicador, o “pilar” utiliza una escala de 0 a 100, para mostrar qué tan cerca está una economía del estado ideal o “frontera” de competitividad en esa área
Sobre la base de cuatro décadas de experiencia en la evaluación comparativa de la competitividad, el índice mapea el panorama de competitividad de 141 economías a través de 103 indicadores organizados en 12 temas. Cada indicador, usando una escala de 0 a 100, muestra cuán cerca está una economía del estado ideal o “frontera” de competitividad. Los pilares, que cubren amplios elementos socioeconómicos son: instituciones, infraestructura, adopción de las TIC, estabilidad macroeconómica, salud, habilidades, mercado de productos, mercado laboral, sistema financiero, tamaño del mercado, dinamismo empresarial y capacidad de innovación.
Con un puntaje de 84.8 sobre 100, Singapur es el país más cercano a la frontera de la competitividad
Otras economías del G20 en el top 10 incluyen Estados Unidos (2º), Japón (6º), Alemania (7º) y Reino Unido (9º), mientras que Argentina (83º, dos lugares abajo) es el país con la clasificación más baja entre los países del G20.
Asia-Pacífico es la región más competitiva del mundo, seguida de cerca por Europa y América del Norte.
Estados Unidos puede haber perdido a Singapur en general, pero sigue siendo una potencia de innovación, ocupando el primer lugar en el pilar del dinamismo empresarial, el segundo en capacidad de innovación y el primero en encontrar empleados calificados.
Los países nórdicos se encuentran entre los más avanzados tecnológicamente, innovadores y dinámicos del mundo, al tiempo que proporcionan mejores condiciones de vida y protección social.
Dinamarca, Uruguay y Zimbabwe han aumentado su participación en las fuentes de energía renovables significativamente más que otros países en sus respectivos niveles de competitividad.
A pesar de los evidentes avances en el desarrollo económico, en el mundo actual vemos que hay países en los que el avance en la superación de la pobreza es lento y en que las tasas de crecimiento económico no se traducen en tasas equivalentes de aumento de riqueza para las mayorías, sino para minorías. También vemos países de los que cienes de miles de personas emigran buscando oportunidades de progreso que sus países de origen les niegan. Ciertamente, son realidades evidentes. Pero luego veremos a que se deben.
La evidencia estadística muestra que el mundo se encamina hacia una convergencia de ingresos entre países ricos y pobres. Los primeros 200 años de desarrollo que iniciaron alrededor de 1750 crearon una gran brecha de ingresos entre los países que despuntaron con la revolución industrial y la incorporación de avances tecnológicos en sucesivas oleadas.
La primera oleada de la Revolución Industrial fue el desarrollo de la máquina de vapor y tecnologías relacionadas, incluyendo la organización de la producción de fábricas a gran escala, nueva maquinaria en el sector textil y de la confección, y nuevas técnicas para producir acero. Una segunda oleada de avances tecnológicos se produjo a mediados del siglo XIX con el ferrocarril, y aún más notablemente el telégrafo, que ofrecía las primeras telecomunicaciones instantáneas en todo el mundo, un avance fenomenal en la capacidad de información difusa a gran escala.
La segunda ola tecnológica también incluyó vapores oceánicos, comercio a escala mundial y dos grandes proyectos de infraestructura: el Canal de Suez, terminado en 1869, que acortó significativamente el tiempo de comercio entre Europa y Asia, y el Canal de Panamá, terminado en 1914, que redujo drásticamente el tiempo de comercio entre la costa este de Los Estados Unidos y los destinos en el oeste de los Estados Unidos, gran parte de América Latina y Asia oriental.
… La tercera oleada de avances tecnológicos implicó la electrificación de la industria y la sociedad urbana a finales del siglo XIX, incluyendo la invención de Edison de la bombilla incandescente y otros aparatos electrónicos. Edison, Westinghouse y otros lideraron la construcción de grandes centrales eléctricas que podían llevar electricidad a hogares, edificios de oficinas y fábricas por alambres, que era la nueva infraestructura definitoria de principios del siglo XX. El desarrollo del motor de combustión interna también fue crítico, al igual que el avance fundamental en la industria química, principalmente en Alemania, con el nuevo proceso para tomar nitrógeno atmosférico y convertirlo en amoníaco para fertilizante (el proceso Haber-Bosch). Este uso de la energía de combustibles fósiles para crear fertilizantes a base de nitrógeno fue el gran avance en el aumento de la producción de alimentos en el siglo XX, permitiendo que una gran proporción de la humanidad, aunque todavía no toda, superara el hambre crónica y los riesgos de hambruna que habían plagado siempre a la humanidad. Jeffrey D. Sachs. “The End of Poverty: Economic Possibilities for Our Time” (2005).
La primera revolución industrial comenzó en 1760 con la invención de la máquina de vapor. La máquina de vapor permitió la transición de la agricultura y la sociedad feudal al nuevo proceso de fabricación. Esta transición incluyó el uso del carbón como energía principal, mientras que los trenes eran el principal medio de transporte. El textil y el acero fueron las industrias dominantes en términos de empleo, valor de la producción y capital invertido. La segunda revolución industrial comenzó en 1900 con la invención del motor de combustión interna. Esto condujo a una era de rápida industrialización utilizando petróleo y electricidad para alimentar la producción en masa. La tercera revolución industrial comenzó en 1960 y se caracterizó por la implementación de la electrónica y la tecnología de la información para automatizar la producción. Bajo las viejas costumbres, hacer las cosas implicaban atornillar o soldar un montón de piezas juntas. La cuarta revolución industrial ahora implica el diseño de productos generados por computadora y la impresión tridimensional (3D), que puede crear objetos sólidos mediante la construcción de sucesivas capas de materiales.
Ahora una Cuarta Revolución Industrial se basa en la Tercera, la revolución digital que se está produciendo desde mediados del siglo pasado. Se caracteriza por una fusión de tecnologías que está difuminando las líneas entre las esferas física, digital y biológica.
Hay tres razones por las que las transformaciones actuales representan no sólo una prolongación de la Tercera Revolución Industrial, sino más bien la llegada de una Cuarta y distinta: velocidad, alcance e impacto en los sistemas. La velocidad de los avances actuales no tiene precedentes históricos. En comparación con las revoluciones industriales anteriores, la Cuarta está evolucionando a un ritmo exponencial en lugar de lineal. Además, está perturbando casi todas las industrias de todos los países. Y la amplitud y profundidad de estos cambios anuncian la transformación de sistemas enteros de producción, gestión y gobernanza”. (Schwab 2015)
Los principales investigadores sostienen que la cuarta revolución industrial dará forma al futuro a través de sus impactos en el gobierno y las empresas. La gente no tiene control sobre la tecnología ni sobre los cambios que vienen con la cuarta revolución industrial. Sin embargo, podemos predecir las oportunidades que vienen con la cuarta revolución industrial: 1) menores barreras entre inventores y mercados, 2) un papel más activo para la inteligencia artificial (IA), 3) la integración de diferentes técnicas y dominios (fusión), 4) mejora de nuestras vidas (robótica) y 5) la vida conectada (Internet).
… Como han señalado los economistas Erik Brynjolfsson y Andrew McAfee, esta revolución podría producir una mayor desigualdad, especialmente en su potencial para perturbar los mercados laborales. A medida que la automatización sustituye a la mano de obra en toda la economía, el desplazamiento neto de trabajadores por máquinas podría exacerbar la brecha entre los retornos al capital y los retornos a la mano de obra. Por otro lado, también es posible que el desplazamiento de trabajadores por tecnología traiga, en conjunto, un aumento neto de los puestos de trabajo seguros y gratificantes”. Klaus Schwab. Min Xu, Jeanne M. David & Suk Hi Kim. “The Fourth Industrial Revolution: Opportunities and Challenges” (2018)
La introducción de innovaciones tecnológicas se hace cada vez más rápidamente. En el caso del auto fueron cerca de seis décadas; del teléfono, cinco; y de las tarjetas de crédito, más de veinte años. Actualmente, el tiempo en que el mercado adopta una nueva tecnología puede ser de apenas unos meses.
El siguiente gráfico dinámico permite comparar las tasas de adopción de nuevas tecnologías durante más de un siglo. Muestra que la velocidad con que se adoptan nuevas tecnologías se aumenta en años recientes. El gráfico sirve como un indicador del aumento del nivel de vida debido a los cambios tecnológicos. Haga click en el botón abajo para reproducir el gráfico dinámico.
El grado de adopción de tecnologías por zonas geográficas en el mundo se muestra en este gráfico del Foro Económico Mundial.
La Cuarta Revolución Industrial ya empezó. El siguiente artículo de Salesforce ofrece una visión general de lo que significa, las tecnologías en desarrollo, su impacto y algunos ejemplos.
En su libro sobre la Cuarta Revolución Industrial, el Dr. Klaus Schwab la describe así: “Comenzó a principios de este siglo y tuvo como base la revolución digital. Está caracterizada por un Internet mucho más móvil y mundial, por sensores más pequeños y más potentes, y por inteligencia artificial y aprendizaje automático”.
Erik Brynjolfsson y Andrew McAfee, investigadores de MIT, describen este período como “la segunda era de las máquinas”. (nota del blog: aquí está la pista para el libro más reciente de Erik y de Andrew, “Machine, Platform, Crowd. Harnessing our Digital Future” [Máquina, plataforma, multitud. Aprovechamiento de nuestro futuro digital].}
…En la Cuarta Revolución Industrial, los principales factores de los cambios asombrosos que estamos presenciando incluyen el costo decreciente de la computación y los dispositivos conectados, la facilidad de implementación de algoritmos de IA, y la caída radical del precio de la secuenciación genética. … Son los avances tecnológicos los que impulsan las revoluciones industriales. Las diez tecnologías de la Cuarta Revolución Industrial son:
- Tecnologías que cambian el mundo físico
- Biotecnología
- Robótica
- Impresión en 3D
- Nuevos materiales
- Internet de las Cosas (IoT)
- Transmisión, almacenamiento y captura de energía
- Tecnologías que cambian el mundo digital
- Inteligencia Artificial (IA)
- Cadena de bloques
- Nuevas tecnologías computacionales
- Realidad virtual y aumentada
Ahora vamos a investigar los efectos e impactos de la Cuarta Revolución Industrial. El primero de ellos es el aumento de la productividad. Las tecnologías como la IA y la automatización han aumentado nuestra capacidad productiva y mejorado la distribución de nuestro tiempo. Sin embargo, no todo es tan sencillo. Aún existen muchas cuestiones morales y éticas acerca de estas innovaciones (si quiere profundizar, consulte, por ejemplo, el argumento de la “Superinteligencia” de Nick Bostrom).
…Las tecnologías que nos rodean evolucionaron y elevaron las expectativas de los clientes. La IA, por ejemplo, ya transformó la expectativa en relación con la atención al cliente. Nuestra referencia de hoy es obtener respuestas rápidas (todo se encuentra a una búsqueda de distancia en Google), servicio personalizado e inteligente, es decir, que tome en cuenta nuestro historial y preferencias.
… Una de las consecuencias de la revolución digital es que estamos produciendo datos de manera exponencial. Aquí tienen una estadística: el 90% de los datos se crearon en los dos últimos años. Videos, fotos, tuits, publicaciones en redes sociales, blogs, sensores, la lista es extensa.
Todos esos datos son alimento para la inteligencia artificial. La IA está fomentando innovaciones en varios tipos de productos y servicios, y cuanto mayor sea el volumen de datos, mejores las predicciones.
Los algoritmos del aprendizaje automático pueden analizar esas transacciones y variables para mejorar el desempeño de los negocios. Por ejemplo, ayudan a las empresas a anticipar las necesidades de los clientes y optimizar precios.
… El Foro Económico Mundial publicó un informe sobre los puntos de inflexión de las nuevas tecnologías y sus impactos en la sociedad.
- Estos son algunos puntos de inflexión que pueden presentarse en el 2025:
- El 10% de las personas usarán ropa conectada a Internet;
- Existirá el primer robot para farmacia en Estados Unidos;
- Aparecerá el primer automóvil hecho en impresora 3D;
- El 5% de los productos de consumo se hará en impresoras 3D;
- El 90% de la población mundial tendrá acceso constante a Internet;
- Los autos automáticos concentrarán el 10% de la flotilla de vehículos en Estados Unidos;
- El 50% del tráfico de Internet en domicilios será dirigido a dispositivos y equipos domésticos;
- Existirá la primera ciudad con más de 50,000 habitantes y ningún semáforo;
- Se empleará la primera IA en el consejo de administración de una empresa.
A medida que se desarrolle la Cuarta Revolución Industrial, estas innovaciones recibirán un lugar en nuestra vida diaria. ¿Qué más podemos esperar para el futuro?
Los avances en poder computacional, La, robótica y ciencias de materiales pueden acelerar el cambio a productos sustentables. Las técnicas de manufactura digital, incluida la impresión en 3D, se aproximarán al proceso productivo de los clientes y lograrán que el mantenimiento de piezas sea más rápido y barato.
Las innovaciones en biotecnología pueden permitir la sustitución de huesos y el trasplante de órganos a partir de impresiones en 3D de las células del tronco de un paciente. Conforme los descubrimientos sobre el funcionamiento del cerebro avanzan, podemos crearnos la expectativa de tener implantes neurales e interfaces cerebro-máquina que solucionen las enfermedades cognitivas.
Las nuevas tecnologías energéticas pueden crear fuentes de bajo costo y sustentables para liberar al planeta de los combustibles fósiles originados en la primera revolución industrial. Qué es la Cuarta Revolución Industrial?
En cuanto a consecuencias que se perciben como negativas, veamos algunas más usuales. Por ejemplo, la sustitución de personas por robots se percibe como una amenaza que aumentaría el desempleo. La preocupación es legítima. Sin embargo, hay que tener en cuenta que toda revolución tecnológica ha afectado a las personas que trabajaban con las tecnologías que pasaron a la obsolescencia. Así ha sucedido con los empleos en la agricultura, que fueron mayoritarios hace más de un siglo y fueron sustituidos por empleos en las industrias manufactureras.
Los robots han liberado a los trabajadores de trabajos pesados, repetitivos, peligrosos y monótonos. Igual que muchas máquinas desde la primera revolución industrial hasta hoy liberaron a las personas de muchos trabajos que hoy se considerarían inhumanos y que hoy se hacen con mayor productividad, reduciendo costos y aumentando la producción. Los trabajos desplazados en la manufactura encuentran su contrapartida en la creación de empleos en el creciente sector de servicios, de modo que la tasa global de desempleo no aumenta. Obviamente, no son todas las mismas personas desplazadas de sus antiguos empleos las que encuentran un nuevo empleo, ya que se exigen diferentes conocimientos y habilidades.
La revolución industrial convirtió a la tecnología en el motor del crecimiento económico (Landes 1969, Mokyr 1990). Antes de 1750, el ingreso per cápita en el mundo se duplicaba cada 6,000 años. Desde entonces, se ha duplicado cada 50 años (DeLong 1999). Esta aceleración fue en gran parte la consecuencia de la aplicación de maquinaria en la producción, lo que nos permitió producir más con menos personas (Frey 2019). Visto desde esta perspectiva, la histeria actual de la automatización es difícil de entender. Las generaciones futuras podrían dar un salto extraordinario desde el “gran enriquecimiento” de la Revolución Industrial. Sin embargo, el proceso de industrialización en sí mismo era un asunto diferente. Los luditas, que se amotinaron contra la fábrica mecanizada, no fueron enemigos irracionales del progreso tecnológico (Citi 2019, Frey 2019). No fueron los que se beneficiaron de la mecanización, por lo que su oposición tenía sentido.
La Revolución Industrial sentó las bases del mundo moderno en el que vivimos hoy, pero llegar allí implicó una transición dolorosa. Incluso cuando el crecimiento del PIB per cápita despegó, las ganancias del crecimiento no llegaron a los bolsillos de la gente promedio. Los salarios reales estaban estancados o incluso cayendo para algunos. A medida que los ingresos de los artesanos desaparecieron, a medida que sus trabajos fueron reemplazados por máquinas, las ganancias del crecimiento fueron para los industriales, quienes vieron duplicar su tasa de ganancias (Allen 2009). Esto llevó a Friedrich Engels a concluir que los industriales propietarios de máquinas se hicieron “ricos en la miseria de la masa de asalariados”. Como señaló el eminente Eric Hobsbawm, la Revolución Industrial comenzó con la construcción de las primeras fábricas y terminó con la publicación del Manifiesto Comunista (Hobsbawm 1962).
¿Por qué los trabajadores participaron en la Revolución Industrial Británica si redujo su utilidad? La respuesta simple es que no lo hicieron. Además de los disturbios, con frecuencia solicitaron al parlamento que bloqueara la introducción de maquinaria. No solo se ignoró su voz, sino que el ejército británico se enfrentó con ingleses que destruyeron máquinas. …
¿Qué habría escrito Friedrich Engels si hubiera vivido hoy? Como han señalado los historiadores de la economía, nuestra era de la informatización ha causado un vaciado similar de los trabajos de ingresos medios como lo hizo la fábrica mecanizada en el siglo XIX (Katz y Margo 2013). Además, al igual que la mecanización durante la Revolución Industrial provocó la caída de la participación laboral del ingreso nacional, la participación laboral decreciente en todos los países está vinculada a la automatización de los empleos de ingresos medios y la reasignación de los trabajadores a empleos de servicios de bajos ingresos. De hecho, en un reciente estudio de varios países, el FMI concluyó que “el avance tecnológico, medido por el cambio a largo plazo en el precio relativo de los bienes de inversión, junto con la exposición inicial a la rutina, han sido los principales contribuyentes a la disminución de la participación del ingreso laboral en las economías avanzadas” (Dao et al. )
Al igual que durante la Revolución Industrial, los perdedores de la tecnología exigen cambios. … Si bien la respuesta política hasta ahora se ha centrado principalmente en la globalización y sus descontentos, muchos ciudadanos ahora también favorecen las políticas para frenar la revolución de los robots. Según una encuesta de Pew Research en 2017, el 85% de los encuestados en los EE. UU. Están a favor de políticas para restringir el uso de máquinas más allá del trabajo peligroso. Mientras tanto, las propuestas para imponer impuestos a los robots para reducir el ritmo de la automatización ahora figuran en el debate tanto en los EE. UU., Europa y Corea. En los Estados Unidos, Andrew Yang incluso ha convertido la automatización en el tema clave de su apuesta por la Casa Blanca en 2020. El impulso ludita podría regresar. …
Podríamos decir que estamos en medio de otra revolución en robótica e inteligencia artificial, que amenaza con hacer que muchos trabajos sean redundantes (Citi 2015, Frey y Osborne 2017). Y como hemos visto, tales tecnologías históricamente han provocado una resistencia generalizada. Si se bloquean las nuevas tecnologías porque algunas personas temen perder sus empleos, el crecimiento y la prosperidad a largo plazo sufrirán como consecuencia. La revolución industrial fue el comienzo de una transformación extraordinaria que benefició a todos a largo plazo. La robótica avanzada y la inteligencia artificial tienen el potencial de hacer lo mismo, pero cosechar los beneficios de las tecnologías en el horizonte requerirá administrar el corto plazo. Carl Benedikt Frey, Ebrahim Rahbari Automation and its enemies, Nov. 2019.
Otra preocupación que ha ido en aumento son los daños al medio ambiente causados por la industrialización como la contaminación ambiental y el cambio climático asociado a la misma. La digitalización ya ha reducido la cantidad de papel que antes se consumía, evitando la tala de gran cantidad de árboles. La presente revolución tecnológica ya ha desarrollado y continúa desarrollando nuevas fuentes de energía limpia para el uso en las industrias y consumidores finales, sistemas de reciclaje, de reducción y eliminación segura de desechos, sistemas de reducción de consumo de energía, sistemas masivos de repoblación forestal, de limpieza de aire y aguas contaminadas, haciendo que las regulaciones sean cada día más exigentes para proteger el medio ambiente.
Hasta la alimentación como la conocemos ahora está siendo transformada. La preocupación por los efectos de la ganadería y las granjas avícolas ha dado lugar a la creación de imitaciones de carne de res y de pollo recientemente lanzadas al mercado.
A nivel mundial, el nivel educativo es más alto que nunca, pero existen notables diferencias en cuánto aprenden los niños en la escuela. En una nueva base de datos, que abarca 160 economías, se armonizan resultados de pruebas regionales e internacionales para calcular los años reales de escolarización que tienen los niños. El promedio de los puntajes de las pruebas oscila entre 600 de los países con el mejor desempeño y 300 de aquellos con el peor desempeño (con un puntaje de 400 como punto de referencia para un nivel de competencia mínimo). Las diferencias se deben a la salud y la nutrición deficientes de los niños en los países de ingreso más bajo, la menor cantidad de años en la escuela (alrededor de 260 millones de niños y jóvenes no asisten a la escuela en absoluto), el ausentismo docente, los profesores que no cumplen con normas de competencia, y la fragilidad, los conflictos y la violencia. La base de datos sobre aprendizaje forma parte del Proyecto de Capital Humano del Grupo Banco Mundial, que incluye una clasificación de los países de acuerdo con sus resultados en salud y educación.
En 2019 se prevé que el 70% de la economía mundial experimente una desaceleración en su crecimiento, lo que no quiere decir que vaya a caer en recesión. La verdad es que la economía mundial no crece permanentemente a una tasa estática, sino que hay años con mayor crecimiento que otros. En el siguiente gráfico se observan las variaciones en las tasas de crecimiento del PIB mundial, mostrando el comportamiento cíclico de las mismas. En el período 1961-2018, solamente en 1964, 1968, 1969 y 1973 hubo un crecimiento del 6% o un poco más y el último año con una tasa mayor de 5% fue 1976. Posterior a ese año, las mayores tasas apenas sobrepasan el 4%, más bien han promediado un 3%. El único año en que la economía mundial se contrajo (-1.7%) es 2009.
Después de la Segunda Guerra Mundial, el mundo ha tendido a eliminar progresivamente las barreras comerciales entre países lo que permitió un largo período de crecimiento económico en el mundo. La desaceleración del crecimiento de la economía mundial en 2018, a partir de la guerra de aranceles entre China y Estados Unidos, ha causado una reducción en las exportaciones de los principales países exportadores. La guerra comercial está incidiendo en una reducción de la producción industrial.
El Informe de competitividad global 2019 del Foro Económico Mundial indica que no todo es color de rosa y que persisten problemas en varios países para lograr erradicar el hambre y la pobreza.
Sin embargo, como hemos visto, las caídas en la producción se han producido en varias otras ocasiones y la economía vuelve a repuntar. Los expertos concuerdan en que las tendencias a mediano y largo plazo indican un crecimiento continuo.
En este artículo, escrito hace cinco años, Ben Carlson aporta importantes argumentos sobre la continuidad del crecimiento económico futuro y la mejora del nivel de vida de la población.
“La humanidad ahora está entrando en un período de transformación radical en el que la tecnología tiene el potencial de elevar significativamente los estándares básicos de vida para cada hombre, mujer y niño en el planeta”. – Peter Diamandis
Hay algunas personas bien educadas por ahí argumentando que el crecimiento económico en el futuro no podrá mantenerse al día con los promedios a los que nos hemos acostumbrado en el pasado.
Esto podría conducir a rendimientos mucho más bajos en los mercados financieros y a un menor nivel de vida. La desigualdad de riqueza continúa ampliando la brecha entre los que tienen y los que no tienen, creando aún más municiones para el desastre que se avecina.
Es fácil dejarse atrapar por esta línea de pensamiento porque generalmente los doctores que presentan el caso tienen modelos complejos y una narrativa para respaldar sus afirmaciones. En un futuro incierto, a veces es fácil pasar a una visión pesimista sobre hacia dónde se dirigen las cosas.
¿Qué pasa si las personas están subestimando el potencial del futuro crecimiento económico mundial y la innovación? Cualquiera que tenga un teléfono inteligente tiene mejores capacidades de telefonía móvil que el presidente de los EE. UU. Hace 25 años y un mejor acceso a la información que el presidente hace 15 años (piense en Google). Es imposible predecir lo que puede suceder cuando el crecimiento exponencial se afianza porque significa que las mejoras se desarrollan sobre sí mismas de manera muy similar al interés compuesto por los esteroides.
Diamandis argumenta que la mayoría de las personas ni siquiera pueden comenzar a imaginar adónde nos llevará el progreso tecnológico continuo porque es difícil comprender el crecimiento exponencial. Y no en un futuro lejano dentro de cientos de años. Regreso al futuro II podría estar aquí antes de lo que pensamos. Él dice que para la década de 2030 podríamos ver grandes avances en todos nuestros problemas más importantes. Estos son algunos de los posibles solucionadores de problemas:
-
-
- Fuentes baratas y amplias de energía reutilizable (solar)
- Agricultura más inteligente (semillas genéticamente modificadas y carne cultivada a partir de células madre)
- Tecnologías de robot (para conducir nuestros automóviles y cuidar a los ancianos)
- Agua limpia en todo el mundo (sistemas portátiles de purificación de agua)
- Mejor atención médica (los médicos usarán tecnologías de laboratorio en un chip para ejecutar cientos de diagnósticos en cuestión de minutos desde una gota de saliva o sangre a través de su teléfono inteligente)
- Filantropía (busque la promesa de donación)
- Dispositivos domésticos interconectados (todo con un enchufe será más eficiente y estará conectado mediante una dirección IP a través de Internet que puede controlar)
- Educación para todos (aprenda en cualquier parte del mundo con acceso a Internet Wi-Fi)
-
Los beneficios de áreas como la educación mejorada también podrían conducir a una mayor libertad y democracia en los países opresivos, aunque esto podría llevar algún tiempo.
Pero si se cumple una fracción de lo que pronostica, esto podría significar (1) niveles de vida más altos en todo el mundo, (2) una creciente clase media de consumidores para comprar productos, ahorrar e invertir, y (3) tecnologías saliendo a la luz que una vez solo estaban reservadas para el cine.
Sin mencionar el hecho de que muchos de estos avances podrían ayudar a cerrar la brecha de la riqueza y sacar a miles de millones de personas de la pobreza (Muchos ven una situación en la que los ricos continúan enriqueciéndose con el progreso tecnológico, pero Diamondis argumenta que realmente tener un impacto mucho mayor en los pobres que en los ricos).
El punto es que nadie tiene idea de la forma del futuro, especialmente cuando se trata de pronosticar desarrollos económicos y tecnológicos. Elijo creer que las personas seguirán queriendo mejorar sus vidas, innovar, ser más inteligentes, ayudar a otros y mantener el motor de crecimiento en la dirección correcta. What if the Future is Better Than We Think? por Ben Carlson, 2014.
No en vano, renombrados economistas reconocen que el sistema de mercado y la libertad de los individuos para elegir qué producir, cómo producir y para quién producir es el único que ha podido crear riqueza y elevar el nivel de vida de las personas.
…”.soy liberal precisamente porque me interesa eliminar la pobreza del Tercer Mundo. Además de creer firmemente que la libertad de los individuos es el valor sobre el que deben fundamentarse la sociedad y la economía (la palabra liberal tiene el mismo origen etimológico que la palabra libertad), estoy profundamente convencido de que la libertad de elección individual dentro de la economía de mercado es un gran mecanismo, quizá el mejor mecanismo que jamás haya inventado el hombre, para crear riqueza y bienestar. Y la historia nos lo demuestra. Tal como dice el economista americano Paul Krugman, «el espíritu mercantil y el afán de lucro han hecho más para un gran número de gente pobre que toda la ayuda humanitaria y todos los créditos blandos concedidos por todos los gobiernos y todas las ONG del mundo a la vez».” Xavier Sala i Martin. Economía liberal para no economistas y no liberales (2001)
Todas las sucesivas oleadas de cambios introducidos por las innovaciones tecnológicas han permitido la creación de más y más bienes y servicios, no solamente ampliando la cantidad producida y reduciendo los precios, sino también mejorando la calidad y características, pero también de productos nuevos y previamente inexistentes, para satisfacer las crecientes demandas de los consumidores, que aumentan en la medida en que aumentan sus ingresos.
Si hay un lugar donde la innovación tecnológica es la dinámica central de las actividades diarias ese es Silicon Valley en California. Estas son algunas de las impresiones de Moisés Naim durante su visita a Silicon Valley:
“Acabo de pasar unos días en Silicon Valley. Desde este valle de California emanan con frecuencia nuevas tecnologías que cambian la vida de millones de personas en todo el mundo. Estuve conversando con inventores, emprendedores e inversionistas, así como con los jefes de las empresas donde trabajan. Muchas de ellas generan cuantiosas ganancias y otras aún no, y quizá nunca lo hagan. Las más sorprendentes son aquellas que son adquiridas por montos enormes a pesar de que sus ingresos son relativamente bajos.
WhatsApp, fue creada en 1999 y contando con 55 empleados y 20 millones de dólares de ingresos en 2014 fue comprada por Facebook por 19 mil millones de dólares.
Una tendencia que se ha acelerado es la de empresas basadas en internet con enorme éxito y sin fines de lucro; sólo quieren hacer el bien. Una de las más destacadas es el Khan Academy, creada por Salman Khan, un joven emprendedor que está revolucionando la educación a escala mundial. Otro ejemplo lo aportan Vint Cerf, uno de los creadores de internet que junto con sus colegas renuncio a monetizar su creación.
Hablar de cambio en Silicon Valley resulta como hablar de pan en una panadería: es lo que allí se hace. De eso viven, sólo en eso piensen, ya eso dedican el inmenso talento que allí se concentra y la imaginable cantidad de dinero listo para apostar por las ideas más audaces.
Es la cultura inherente a Silicon Valley: la ambición, la búsqueda de grandes números de usuarios, la propensión al solucionismo, es decir, la suposición de que todo problema tiene solución y que muy probablemente esa solución implica el uso de internet. Es una cultura de jóvenes, de gente que viene de todas partes del mundo, donde lo que importa es lo que uno sabe o lo que uno puede inventar, no donde nació, su color de piel, su acento, cómo viste o quiénes son sus padres. Es la meritocracia más intensa que he visto. También es una cultura que desdeña al gobierno, las organizaciones jerárquicas y centralizadas. En cambio, venera la informalidad, la agilidad, la movilidad, la inteligencia y sobre todo la propensión al riesgo y, más correctamente el no tenerle miedo al fracaso.
Mientras que en otras culturas un fracaso deja una marca negativa e indeleble en la reputación de una persona, en Silicon Valley el fracaso es visto como un valioso aprendizaje que ayuda a evitar errores en el futuro. Cabe también destacar que Silicon Valley se podría llamar el valle de los hombres: el número de mujeres es sorprendentemente bajo.
En esta visita detecte algunos cambios. Hay más empresas, más tecnologías, más iniciativas, más incursión en nuevos sectores -de automóviles a energía exploración espacial-; hay más dinero disponible para la inversión y más ganas de tener clientes fuera de Estados Unidos.
Muchas de las compañías recién creadas son micro multinacionales: desde el inicio nacen con la ambición de operar mundialmente.
Otra tendencia que detecte es que, aunque no lo reconozcan, los gigantes se sienten inseguros. Google, Facebook y otra de las empresas más grandes sienten la presión de consumidores que se rebelan ante alguna de sus prácticas y de gobiernos dispuestos endurecer las regulaciones.
Finalmente ¿cuáles son las principales sorpresas que nos legará el Silicon Valley en los próximos años? Imposible saberlo. Pero me arriesgo a señalar tres sectores que aportan dan innovaciones muy transformadoras. Uno es el campo de la energía, dónde habrá interesantes inventos relacionados con el almacenamiento y la mejora de baterías de gran tamaño, así como tecnologías más limpias y menores costos.
El segundo es el “internet de las cosas”, es decir, la creciente interconexión de todo tipo de aparatos y objetos a través de red. Se espera que muy pronto internet esté conectando entre sí más objetos (desde electrodomésticos a reservas de farmacia) que personas. Un tercer sector es la salud: me llevé la impresión de que veremos interesantes avances en tecnologías que mejoran la calidad de vida de los ancianos y otras que aumenten drásticamente la eficiencia y abarata en la prestación de servicios médicos y hospitalarios. Y muchas más de la popularización del dinero virtual como el Bitcoin o la exploración del espacio o la proliferación de robots de todo tipo”. (Moisés Naim en “Repensar el mundo 111 sorpresas del siglo XXI”.
No hay duda de que el talento y el espíritu emprendedor, la meritocracia, la libertad individual y el desarrollo de las fuentes de financiamiento son los factores que han hecho posible lo que ocurre en Silicon Valley. Sin el entorno de una economía de mercado competitiva y un sistema político democrático, es imposible desarrollar esos factores.
Sin embargo, la presente revolución tecnológica también trae perdedores, particularmente las personas que se verán afectadas por la robotización, que combinada con la globalización afectará muchos de los trabajos actuales, fenómeno para el que Richard Baldwin acuña la palabra globótica. Este tema lo aborda en un artículo, del cual extraigo estos párrafos:
… Nuestra capacidad de recopilar, transmitir, almacenar y procesar información digital se duplica cada año más o menos, y esto, a su vez, está creando un nuevo tipo de globalización que es virtual, y un nuevo tipo de robot que puede pensar.
La tecnología de ‘presencia virtual’ y la traducción automática instantánea permitirán a los extranjeros talentosos que se encuentran en el extranjero brindar servicios en nuestras oficinas y espacios de trabajo. Será casi como si estos trabajadores remotos estuvieran realmente allí con nosotros. Una forma de inteligencia artificial (IA) conocida como ‘aprendizaje automático’ es enseñar a las computadoras a automatizar tareas que involucran el reconocimiento de patrones basado en la experiencia, tareas que son comunes en trabajos profesionales, administrativos y de servicio. La parte de más rápido crecimiento del mercado de software empresarial, puede sorprenderse al aprender, es la automatización robótica de procesos (RPA), las aplicaciones que utilizan el aprendizaje automático para observar y luego copiar estas tareas.
Estos cambios desordenarán los trabajos del sector profesional y de servicios radicalmente más rápido que la globalización interrumpió el sector manufacturero. La globalización tradicional fue impulsada por un aumento en línea recta en nuestra capacidad de enviar mercancías. AI y RI pueden crecer exponencialmente.
Nuestros cerebros, que evolucionaron para comprender un mundo a poca distancia, encuentran que el crecimiento exponencial es inverosímil. El crecimiento exponencial significa que cada paso es dos veces el tamaño del anterior. Si pudieras duplicar la longitud de tu zancada cada vez que das un paso, tu zancada 23 podría llevarte de Nueva York a Los Ángeles.
Globotics avanza exponencialmente, debido a tres leyes digitales: la Ley de Moore, la Ley de Gilbert y la Ley de Metcalf (ver mi secuencia de blogs ). También es la razón por la que tantas personas no son conscientes de cuán revolucionarios serán los cambios o viven negando la rapidez con la que vendrán.
La revolución globótica promete un futuro maravilloso. Todos podríamos prosperar en una sociedad más justa y más humana. El peligro radica en una reacción neoludita.
Con su ritmo y enfoque en el servicio y los trabajos profesionales, la globótica podría destruir los cimientos de la prosperidad de la clase media en América del Norte y Europa….
Muchos de estos trabajos están en los sectores que los ‘globots’ interrumpirán. Si millones de vidas caen en desorden y las comunidades se ven afectadas, probablemente no veremos una actitud de “mantener la calma y continuar”. Existe una gran posibilidad de que haya una reacción violenta.
El desplazamiento de empleos será impulsado al ritmo de la tecnología digital, porque el desplazamiento de empleos es el modelo de negocio. El reemplazo de trabajo, por el contrario, está impulsado al ritmo del ingenio humano y el espíritu empresarial, que será mucho más lento.
Toda gran transformación crea triunfos para quienes pueden aprovechar las oportunidades y tragedias para quienes no pueden. Preparar a la sociedad para la agitación requiere una comprensión profunda de las fuerzas técnicas, económicas y políticas que configuran la globótica, ya que no habrá una receta universal para el éxito. Los cambios están llegando demasiado rápido y de muchas maneras para que funcione una fórmula única para todos. Las personas tendrán que pensar qué significa la globotics para su situación particular.
Puedo pensar en tres principios:
-
- Las viejas reglas no funcionarán. La regla estándar para prosperar en la era de la globalización era obtener más habilidades. Esto no funcionará en la era de la globótica, porque los globots tienen muchas habilidades.
- No compitas con los globots . Aléjese de las habilidades basadas en el reconocimiento de patrones basado en la experiencia y hacia tareas que requieren contacto frecuente y en persona, que los globots no pueden copiar.
- Vea su humanidad como una ventaja, no una desventaja . Los humanos tienen ventajas únicas sobre los globots en cosas como conocimiento cultural local, juicio, empatía, intuición, creatividad y comprensión de interacciones complejas entre equipos de humanos. Con la preparación adecuada, deberíamos ser capaces de utilizar las funciones de aprendizaje rápido y ahorro de tiempo de globotics para hacernos más productivos a nosotros mismos y a nuestras empresas y responder mejor a las oportunidades y desafíos competitivos. Richard Baldwin. Sense and nonsense in the public discussion of the future of work. Nov. 2019.
Carl O. Pabo, fundador y presidente de Humanity 2050, además de reconocer que ha “mejorado claramente la vida diaria de la mayoría de la humanidad”, advierte en un artículo más reciente de la necesidad de abordar el desarrollo tecnológico con un enfoque integrador, dadas las externalidades y efectos negativos secundarios en el uso de algunas tecnologías. Dice:
En los últimos cientos de años, la ciencia y la tecnología, guiadas por la razón y el conocimiento, han mejorado claramente la vida diaria de la mayoría de la humanidad. Pero el progreso no es lineal. Cada avance produce algún tipo de interrupción y efectos secundarios que la sociedad lucha por abordar.
Por ejemplo, el proceso Haber-Bosch para la fijación artificial de nitrógeno aumentó los rendimientos agrícolas, pero ha provocado que las vías fluviales de todo el mundo se contaminen con la escorrentía debido al uso excesivo de algunos fertilizantes. Los clorofluorocarbonos, utilizados como refrigerantes, causaron el agujero de ozono, pero los esfuerzos para reemplazarlos dieron lugar a hidrofluorocarbonos , que son peligrosos gases de efecto invernadero. Y aunque los antibióticos han salvado cientos de millones de vidas, ahora se usan tan ampliamente que las cepas resistentes a los medicamentos se han convertido en un nuevo riesgo para la salud humana. Hay muchos más ejemplos de este tipo en todas las áreas de la ciencia y la tecnología. … Las empresas que desarrollan nuevas tecnologías, por ejemplo, deben evaluar y mitigar los riesgos en puntos clave de los procesos de investigación, desarrollo e implementación.
… La democracia y el capitalismo, junto con la ciencia moderna, han dado lugar a un notable florecimiento del pensamiento, la creatividad, la expresión y la invención, que ha consolidado la suposición de larga data de que el conocimiento, y las perspectivas de control humano de nuestro destino, aumentarían constantemente. Pero ahora hemos entrado en una fase en la que la complejidad creciente está creando un mundo que nadie entiende en detalle. … Este es un llamado a la acción global, digno de nuestras mentes más brillantes. Carl O. Pabo. Escapando de la trampa de la complejidad global. Enero 2020.
El Foro Económico Mundial ya está trabajando “para garantizar que las tecnologías nuevas y emergentes ayuden, no perjudiquen, a la humanidad”.
El Foro Económico Mundial fue el primero en llamar la atención del mundo sobre la Cuarta Revolución Industrial, el período actual de cambio sin precedentes impulsado por los rápidos avances tecnológicos. Las políticas, las normas y los reglamentos no han podido seguir el ritmo de la innovación, creando una creciente necesidad de llenar este vacío.
El Foro estableció el Centro para la Red de la Cuarta Revolución Industrial en 2017 para garantizar que las tecnologías nuevas y emergentes ayuden, no perjudiquen, a la humanidad en el futuro. Con sede en San Francisco, la red lanzó centros en China, India y Japón en 2018 y está estableciendo rápidamente Centros de afiliados administrados localmente en muchos países de todo el mundo.
La red global está trabajando en estrecha colaboración con socios del gobierno, las empresas, la academia y la sociedad civil para codiseñar y poner a prueba marcos ágiles para gobernar tecnologías nuevas y emergentes, incluida la inteligencia artificial (IA) , vehículos autónomos, blockchain, política de datos, comercio digital, drones, internet de las cosas (IoT), medicina de precisión e innovaciones ambientales. Briony Harris. Este es el mayor riesgo que enfrentamos con la IA, por el CEO de Google Sundar Pichai. Enero, 2020.
Confío en que las mentes brillantes continuarán creando novedosas formas de mejorar cada vez más el nivel de vida de los ciudadanos. Lamentablemente, son unos pocos. Los muchos, la mayoría que solo espera a disfrutar de lo que los pocos hacen, podrían verse tentados a elegir lideres políticos y autoridades que poco o nada comprenden sobre cómo funciona el motor de las economías y estancar el progreso. con medidas insensatas.
Arturo J. Solórzano
Febrero, 2020